Entradas

Mostrando entradas de 2022

No lloro

Imagen
Miro mi rostro al espejo, Quiero llorar  Y no lloro,  Siento dolor  No lloro, Quiero sanar, No puedo llorar. ¿Es que ya no hay lágrimas O es el ego que no para? Suspiro con ira, Quiero llorar No lloro. Mi pecho se inflama, Mi cabeza da vueltas, Mis manos tiemblan, Quiero llorar  No lloro. Ni una lágrima que derramar, Me he secado, Me he vaciado. Las decepciones queman,  Palabras que quedan, Acciones que hablan. Quiero llorar  Y no lloro. 12 de octubre de 2021 Carla Mariana Rodríguez Yústiz

El Muelle

Imagen
El ir y venir de olas en el muelle. Este sonido mágico del agua,  el atardecer que evoca   a algunos de mi niñez, los veleros y el aire tibio.  Quiero detenerlo todo.  Quedarme aquí contemplando  todo y contemplandome a mi.  Diluyo mis pensamientos  en la ola que golpea suave la roca  y arropa sutilmente la arena.  Veo mis memorias  en el límpido lago que asemeja un mar.  Me veo en un muelle de Playa Norte  metiendo los pies en el agua,  Me veo buscando erizos de mar.  Me veo con mi traje de baño rojo de lazos verdes y mi piel morena.  Me veo ingenua y adorando el olor a sal. Carla Mariana Rodríguez Yústiz

Ellos

Imagen
Él no quiso arriesgar nada  y se fue nadando a una isla.   Ella se convenció de a poco a quedar registrada en unas hojas escritas.   Se fue perdiendo el idealismo de un amor sin físico, en archivos bloqueados por el nuevo comienzo.  Él deshizo lo que un día juró no hacer, se amarró sin conciencia  y a pura inocencia con otra.  Lo hizo aún escribiendo de nuevo a ella.  Lo hizo mientras le mentía y ella creía.   Ella sintió la daga, que apuñalaba una vez más su lealtad absurda,  se lanzó al precipicio desde la esquina más oscura.  Se llenó de ira.  Él quería volver y siempre que la buscaba, ella un sorbo de aliento le daba.  Él cayó de su pedestal,  sintió el rechazo y el martirio de amar sin ser amado.  Ella se había marchado al norte, Él hizo lo mismo y se fue al sur.  Cada uno en su polo vivían lo que debían vivir.  Él buscando el consuelo en ese amor añejo de ella,  que ahora necesitaba para su ego he...

Ahí estás

Imagen
  Voy a tu encuentro,  la velocidad me nubla,   las luces pasan lento,  el nudo en mi estómago es inhumano,  me quema por dentro.  Es la ansiedad de verte y hablarte.  Trato de respirar despacio,   de no desesperarme  y que el tráfico no me enloquezca.  Los segundos me llenan de adrenalina,  Ahí estás!. Te miro a lo lejos vestido de azul como este cielo.  Sonrío, tu presencia me corta el aliento.  Ahí estás, alto, con tus anteojos y tú sonrisa.  Ahí estás, mostrando un poco tus piernas que me hipnotizan.  Vienes y voy.  Ni en mis sueños pude imaginar sentir esto.  Detienes mi corazón con un beso en la mejilla.  Tu saludo franco y educado marcan distancia.  Mientras yo me conformo con tu amistad, escondiendo mi alma. Carla Mariana Rodríguez Yústiz 

Hemos cambiado

Imagen
  Entonces  ya no somos los mismos, las situaciones, circunstancias  nos han hecho distintos. Los sueños han cambiado. No solo se nota en la piel cansada en los cabellos que pintan canas, se nos nota en la voz experimentada y en los ojos que son ventana. Es que tampoco nos hablamos, quizás el tiempo socavó la empatía se llevó consigo como viejas hojas las risas mutuas y las alegrías. Se llevó la camaradería, extrapolo los sentimientos de amistad  poniendo en medio mil tonterias. En casa de mi madre en una caja gris, conservo la carta que me diste con un poema de Benedetti "Hagamos un trato" junto a otros papeles añejos, que guarde anclando los viejos recuerdos  de lo que valore de una amistad sincera, separada por la distancia,  el tiempo y el pensamiento.  Hoy te veo y no se quien eres Pero sé quién fuiste. Valoro el haberte conocido  Así hoy no cuente contigo uno  Y mucho menos hasta cinco. Carla Mariana Rodríguez Yústiz  29 de Enero 2...

Cada segundo

Imagen
El frío se vuelve humo en las calles de mi ciudad,  el viento de otoño arrastra las hojas  y recuerdo esos días  de cálido caribe que dejé atrás.   Allí quedó anclado el recuerdo  de tus ojos verdes  que hacían poesía junto a la mía.  En esa ciudad que no duerme  custodiada por el Avila.  Allí creímos tener el infinito en las manos.  Dibujamos tantos sueños  sobre papel mojado.  Reímos y lloramos.  Conocimos nuestras almas  y lo implacable del tiempo.  Recorrimos juntos mis calles  y te hice parte de mis días.  Fueron muchos los viajes,   los holas y las despedidas.  Nos perdonamos tantas cosas  y lo oscuros que podíamos ser.  Nos dijimos un hasta luego,  y nunca más nos volvimos a ver.  El destino nos mantuvo en contacto  a través de los años y la distancia.  Hoy ya son siete.  Siete era el número mágico.  Y sé que viniste a mi pensamiento...

Castillos de arena

Imagen
Hubo tiempos donde construía castillos de naipes,  y sobre ellos sueños.  Los sueños se transformaban en pesadillas, y los castillos en un vacío incalculable.   Me retiraba a la sombra,   allí donde permanecí años escondida,  como si fuera una mancha de vergüenza, una alegría no deseada que debía estar oculta de una realidad paralela. Desdoblaba mi imagen en cada realidad,   como en una fiesta de disfraces  siempre podía adoptar otra identidad.  Rebane el corazón en lonjas muy delgadas,  no quería quedarme hueca,  así no sienta igual,   así no exprese igual  amarme un poco no está demás.  Me quedé quieta en la sombra del árbol  que me cobijaba y me protegía.  Vinieron a buscarme un día,  otro día y otro. Vi como la arena de sus castillos se derrumbaba,  y todo se fundía con la nada.  Ahora habito en las ramas.  Les dí lo último que había reservado  para cada constructo...

Periodos

Imagen
Foto: Carlos Eduardo Rodríguez "Rengar sobre el granito gris" Si pudiese hablar de mi vida sería por periodos. Se me hace más fácil. Así como buscar en un archivo.  Haciendo retrospectiva, veo mi vida en estos momentos en un paréntesis. Un paréntesis que se va agrandando con el paso de los días y los años.  Mi paso en Montréal lo veo aun como transitorio, no me veo vieja aquí, no me siento. Así de simple no me siento. No vibro. Es una ciudad maravillosa, hermosa, de gente amable y diversa. Me ha enseñado mucho y me ha castigado también. Pero aquí no vibro. Este paréntesis ha ido creciendo y mis hijas también. Yo me he hecho más adulta y a Reynaldo le han salido más canas. Mi madre trata de adaptarse a sus 70 años a este sitio y como yo busca la manera pero no sabe cómo. Pero hace su curso de francés todos los días sin falta hasta en domingo de forma online. Cuando veo hacia atrás, recuerdo el sol entrando por la ventana de la casa de mis padres en Naguanagua en las tardes....

Almas

Imagen
Mirando el techo por las noches, a mis 5 años, sentía miedo de la cortina y el viento que susurraba eternamente. Venías a veces y te acostabas a mi lado a rezar conmigo. Ahora cada vez que en mis noches rezo, "el gloria" tiene tu voz. Muchas veces te preguntaba con pavor horroroso, tal como hoy lo siento,  con ese escalofríos que recorre mis manos : ¿Dónde está el universo ? ¿Quién lo sostiene? ¿Somos como hormiguitas en una caja de zapatos de un niño que juega con nosotros ? Eso me da miedo...¿somos nada?  Tú solo decias: No lo sé. ¿De dónde sacas esas cosas? Yo decía : me viene a la cabeza. Recuerdo un día que te dije : ¿Soy tu alma gemela ? Y tú respondiste: puede ser. Yo te dije: Sabes yo sé que tú estás casada con papá pero yo creo que él no te ama tanto como yo, yo estoy aquí porque te amo de siempre. Yo soy tu alma gemela. Tu respondiste: Sí, lo eres mi amor, yo también te amo.  Hoy soy más parca, más distante, este universo extraño dentro de la caja de zapatos me...